La Concejalía de Salud Pública, a través del área de la Oficina de Información al Consumidor, ha ofrecido una serie de recomendaciones para prevenir la ola de calor que azota estas primeras semanas del verano y evitar daños sobre la salud personal, sobre todo, de las personas con mayor riesgo, en este caso, niños, enfermos crónicos y mayores en general.
Se recuerda que cuando las temperaturas sobrepasan los 30º centígrados, en ocasiones rondan los 40 grados , es normal sufrir ciertas molestias (excesiva sudoración, dificultad para descansar, etcétera), sin embargo podemos vernos inmersos en un grave problema de salud si aparecen los riegos derivados de la deshidratación o el denominado “golpe de calor”.
Según informan fuentes de este departamento, el “golpe de calor” se produce por los efectos de temperaturas tan altas o, también, por largas exposiciones al sol; de forma que se detecta esta dolencia cuando aparece un cuadro de síntomas como son dolor de cabeza, fiebre, sequedad de las mucosas (boca y nariz), deshidratación de la piel, aturdimiento, dolores y calambres musculares; alucinaciones, delirios y pérdidas de conocimiento; y al sucederse una destrucción celular cabe la posibilidad que dejen de funcionar distintos órganos pudiendo llegar a producir la muerte.
Las personas afectadas pueden perder el reflejo de la sed, con el consiguiente avance del proceso de deshidratación; por lo que se ofrecen una serie de recomendaciones: beber con periódica frecuencia aún sin tener acusada sensación de sed -una cantidad de referencia puede ser 3 litros entre agua, zumo y refrescos, ingerir alimentos que favorecen la hidratación (gazpacho, sandías, peras, etcétera) y evitar exposiciones prolongadas al sol, especialmente en las horas centrales del día.
También se recomienda usar protectores solares adecuados, vestir ropas ligeras, frecuentar ambientes frescos, evitar flujos de aire caliente, no practicar deportes en las horas de calor y tomar líquidos antes y después del ejercicio. Se advierte de la necesidad de no cometer imprudencias relacionadas con el sol para evitar sus consecuencias sobre la piel.
